• Con el objetivo de reconocer y recordar al destacado escritor y poeta, la CNL llevará a cabo la actividad especial Apio verde tu yu
  • Participarán Eduardo Langagne, Hernán Lavín Cerda y Raymundo Silva
  • Miércoles 5 de septiembre a las 19:00 en el Centro de Creación Literaria Xavier Villaurrutia

Poemas y antipoemas es un libro importante donde se reflexiona sobre el concepto que Nicanor Parra marca. La antipoesía no está fuera de la tradición de la poesía del mundo y mucho menos lo está de la tradición poética de Hispanoamérica”, comentó Eduardo Langagne sobre la obra del reconocido escritor.


Apio verde tu yu es el nombre de la actividad conmemorativa por los 104 años del natalicio del escritor Nicanor Parra. En la actividad organizada por la Coordinación Nacional de Literatura (CNL) del Instituto Nacional de Bellas Artes participarán Eduardo Langagne, Hernán Lavín Cerda y Raymundo Silva, quienes hablarán sobre la vida y obra del poeta chileno. Además, se le recordará con un popurrí de melodías compuestas por Violeta Parra, interpretado por María Hanneman Vera en el piano. Se realizará el miércoles 5 de septiembre a las 19:00 en el Centro de Creación Literaria Xavier Villaurrutia.

 



 

En entrevista, el escritor Eduardo Langagne habló sobre la importancia de recordar al autor chileno: “Nicanor pertenece a la familia de los grandes exponentes de la poesía en Chile, pero ‘familia’ la extiendo para referirme también al importante círculo de poetas de América Latina. Creo que él tiene una obra muy singular, ofreció a la poesía una perspectiva novedosa y deja muchísimas propuestas para continuar el desarrollo de nuestra literatura”.



 

La grandeza y significación del antipoeta puede sintetizarse en dos citas de autores chilenos. En Ocho segundos de Nicanor Parra, Roberto Bolaño dijo que “Parra escribe como si al día siguiente fuera a ser electrocutado”, mientras que Rafael Gumucio, en Letras Libres, Nicanor Parra. El recién Nacido, escribió: “Alumno aventajado de un terremoto, Nicanor Parra no volverá a creer en la permanencia de nada…”.



 

Langagne consideró de gran valor el hecho de que Parra haya obtenido el Premio Cervantes, que fue recibido por su nieto, Cristóbal Ugarte. El director de la Fundación para las Letras Mexicanas citó el discurso que Ugarte pronunció en nombre de su abuelo. “En estos momentos y en la distancia mi abuelo se formula la siguiente pregunta: ‘¿Se considera usted acreedor del Cervantes?’, 'Claro que sí', '¿Por qué?', ‘Por un libro que estoy aún por escribir'”.



 

Para el escritor mexicano estas palabras describen a Parra como un hombre inteligente, valioso, “ese hombre con un cuaderno siempre en mano que llenaba con su letra redonda, cuidadosa y muy legible. Él les dio a los cuadernos un valor adicional como objetos de culto”.



 

En todo su trabajo poético ha intentado recoger la tradición de su idioma, especialmente la tradición de América Latina. “Nicanor Parra nos permite en este momento la posibilidad de seguir escribiendo con frescura, pero con profundidad”, finalizó Langagne.



 

Nicanor Parra nació en San Fabián de Alico, Chile, el 5 de septiembre de 1914. Fue poeta, físico y matemático. En 1937 se graduó en Santiago como profesor de Matemáticas y Física por el Instituto Pedagógico de la Universidad de Chile, donde años más tarde trabajaría como docente. De esta época es su primer libro de poemas, Cancionero sin nombre (1937). En 1954 se publicó su obra Poemas y antipoemas. Los años sesenta fueron especialmente prolíficos, algunos de sus títulos más destacados de esa época son Versos de salón (1962), Manifiesto (1963), Canciones rusas (1967) y Obra gruesa (1969), entre muchas otras.