· Reflexiones de un periodista acercade la vida en Cuba luego de la Revolución

· Se presentará el miércoles 5 de julio en la Sala Adamo Boari del Palacio de Bellas Artes

Los sentimientos que surgieron al conocer la muerte de Fidel Castro, fueron volcados en Los nómadas de la noche, libro del periodista y escritor Rubén Cortés, quien nació en Pinar del Río, Cuba, en 1964, y radica en la Ciudad de México desde 1995.

 

 

Fidel Castro falleció el 25 de noviembre de 2016 a las 22:29 horas y estremeció al mundo. Para quienes vivieron bajo el régimen cubano, el impacto fue distinto. Los recuerdos afloraron, eso le sucedió al escritor y periodista cubano Rubén Cortés, a quien le encomendaron redactar un texto sobre la muerte del líder cubano, y escribió el libro Los nómadas de la noche.

Dicho texto se dará a conocer el miércoles 5 de julio a las 19:00 horas en la Sala Adamo Boari del Palacio de Bellas Artes con los comentarios de los periodistas Rafael Rojas Gutiérrez, Julio Trujillo, Julio Patán y el propio autor. Bajo la ficción y la historia, esta crónica de Rubén Cortés retrata las consecuencias de la Revolución cubana después de la muerte del comandante Fidel Castro.

“Me fui de Cuba. Por eso sé que lo único imperdonable es el olvido, y que el pasado no es propiedad de nadie”, afirma el autor en entrevista. Y agrega: “Los reportajes luctuosos de estos días no van a extraviar en mi memoria aquel discurso de Fidel Castro que se convirtió en un surtidor de olvidos, de desamores incesantes, de destierros vitalicios, de olvidos implacables, de amistades perdidas, de familias separadas. Una advertencia escalofriante a quienes partían al exilio porque no estaban de acuerdo con su gobierno”, opina el escritor y periodista.

“Es muy serio no poder disfrutar nunca más de este pueblo, de esta compañía, de las bellezas de nuestra patria, de nuestras playas, de nuestros campos, de nuestra música; pero sobre todo, de este despertar, de esta alegría de vivir este minuto singular de nuestra historia; ya es de verdad bastante castigo haber renunciado a eso para siempre”.

Familia, amigos, poetas, son recordados por Rubén Cortés en su libro, donde los recuerdos afloran... y también los miedos, ese miedo que prevalece, aun cuando existan decenas de años y miles de kilómetros de distancia de la isla, lo que sufren muchos cubanos que viven en el exilio y practican toda clase de oficios por el mundo.

“Los he visto envueltos de pies a cabeza, en ropajes que parecen sábanas, en los barrios arracimados de Islamabad y de Karachi en Pakistán; vendiendo mojitos, vestidos de camisas color mostaza y pantalones rojos en tabernas de Palermo; arrebujados en abrigos y gorros ofreciendo congrí en una fonda de Amsterdam; escondidos.

“Los he visto vendiendo alfombras y baratijas de barro en un mercado de Mádaba en Jordania, cantando la Guantanamera en Guatemala, bailando en Bogotá, de guitarristas en Mérida, escribiendo en la Ciudad de México, pilotando un barco arenero en las aguas del Caribe mexicano en Holbo. Detrás de la ventanilla de un banco en Seattle, tirando los caracoles y la cadena de Orula en Santo Domingo y Santiago de los Caballeros, manejando un camión en Nueva York y tomando el autobús en Jerusalén.

“He sabido que hacen poesía en Madrid, que son empresarios en París o tienen una flotilla de taxis en Roma; que sobreviven en Santiago de Chile, boxean en Bakú y que un cubano es muy famoso porque alquila camellos en las pirámides de Egipto”.

Se trata, sin duda, de una narración puntual de los acontecimientos que vive día tras día la sociedad cubana y que el autor sufrió en carne propia al lado de su familia, que al final termino disgregada como tantas otras. Eso es lo que presenta al lector, el autor de Los nómadas de la noche.

Cortés, señaló que su libro es “literatura de la realidad, escrita sin cambiar nombres o falsificar hechos. Fue hecho bajo presión, pero con cuidado especial por las palabras, las imágenes, la búsqueda esmerada de poemas y textos ajenos que utilizo y surgió un cuaderno construido letra a letra, sin ninguna de más y ninguna de menos.

Indicó que debe ser leído como el final de la trilogía que inició con ¡Cuba, Cuba! y continuó con Un bolero para Arnaldo. El epílogo será sobre la vida de los cubanos en Miami. Sobre los no noticiables, los más comunes, con un fiel registro de los entornos y detalles personales íntimos.

Rubén Cortés nació el 18 de enero de 1964 en Pinar del Río, Cuba. Es graduado de periodismo por la Universidad de La Habana. Radica en la Ciudad de México desde el 15 de octubre de 1995. Ha sido corresponsal de guerra, subdirector general del periódico La Crónica de Hoy, jefe de la portada en el diario Reforma, director editorial en el noticiario Hechos de Javier Alatorre, en TV Azteca, profesor en la Universidad Iberoamericana y corresponsal de Prensa Latina.

Es autor de Crónicas de Guerra, Afganistán e Irak en el frente de batalla (2003), Nueve meses en la eternidad (2007), ¡Cuba, Cuba! (2009), Un bolero para Arnaldo (2015), y Los nómadas de la noche (2017), todos bajo el sello Cal y arena. Actualmente es director general de La Razón.