Comunicado No. 29

 

*** Conaculta rinde homenaje al autor en el 25 aniversario de su fallecimiento

 

 

El escritor jalisciense Juan Rulfo (16 de  mayo 1917- 7 enero, 1986) alcanzó el reconocimiento mundial con la publicación sólo de dos obras: el libro de cuentos El Llano en llamas (1953) y la novela Pedro Páramo (1955), y aunque después no dejó de escribir sólo dio a la imprenta contados textos (guiones de cine y reseñas). Además es autor de una gran cantidad de fotografías, mayoritariamente de la población y el campo mexicanos, que lo sitúa entre los maestros de la lente del siglo XX.

 

Comunicado No. 29

*** Conaculta rinde homenaje al autor en el 25 aniversario de su fallecimiento

 

El escritor jalisciense Juan Rulfo (16 de  mayo 1917- 7 enero, 1986) alcanzó el reconocimiento mundial con la publicación sólo de dos obras: el libro de cuentos El Llano en llamas (1953) y la novela Pedro Páramo (1955), y aunque después no dejó de escribir sólo dio a la imprenta contados textos (guiones de cine y reseñas). Además es autor de una gran cantidad de fotografías, mayoritariamente de la población y el campo mexicanos, que lo sitúa entre los maestros de la lente del siglo XX.

En el 25 aniversario de su fallecimiento Conaculta rinde homenaje al autor cuya obra ha sido ampliamente difundida internacionalmente con más de 50 traducciones a idiomas como inglés, francés, alemán, portugués, holandés e italiano, pero también al serbocroata, ucraniano, griego, chino, japonés, turco, hebreo, lapón y árabe, por mencionar sólo algunos.

 

 

 

Además, el impacto de la literatura rulfiana también se explica por la temprana atención que recibió de la crítica. Han reflexionado sobre su trabajo los escritores Jorge Luis Borges, Gabriel García Márquez, Mario Benedetti, Carlos Fuentes y José María Arguedas, entre otros. También los críticos Emmanuel Carballo, Carlos Blanco Aguinaga, Emir Rodríguez Monegal, Hugo Rodríguez Alcalá y Joseph Sommers, entre otros.

 

 

 

Fuera del ámbito hispanoamericano, han escrito sobre Rulfo autores de la talla de Günter Grass, Elias Canetti, Tahar Ben Jelloun, Susan Sontag, Kenzaburo Oé, Urs Widmer, Gao Xingjian y el crítico inglés Jean Franco.

 

 

 

Borges escribió en 1985: “Pedro Páramo es una de las mejores novelas de las literaturas de lengua hispánica, y aun de la literatura.”

 

 

 

Por su parte, Gabriel García Márquez, en 1978, dejó este testimonio: “A Juan Rulfo, por otra parte, se le reprocha mucho que sólo haya escrito Pedro Páramo. Se le molesta siempre preguntándole cuándo tendrá otro libro. Es un error. En primer término, para mí los cuentos de Rulfo son tan importantes como su novela Pedro Páramo, que, lo repito, es para mí, si no la mejor, si no la más larga, si no la más importante, sí la más bella de las novelas que se han escrito jamás en lengua castellana. Yo nunca le pregunto a un escritor por qué no escribe más. Pero en el caso de Rulfo soy mucho más cuidadoso. Si yo hubiera escrito Pedro Páramo no me preocuparía ni volvería a escribir nunca en mi vida.”

 

 

 

A Susan Sontag pertenece esta opinión: “La novela de Rulfo no es sólo una de las obras maestras de la literatura mundial del siglo XX, sino uno de los libros más influyentes de este mismo siglo.”

 

 

 

Breve apunte biográfico

 

 

 

“Juan Rulfo nació el 16 de mayo de 1917. Él sostuvo que esto ocurrió en la casa familiar de Apulco, Jalisco, aunque fue registrado en la ciudad de Sayula, donde se conserva su acta de nacimiento. Vivió en la pequeña población de San Gabriel, pero las tempranas muertes de su padre, primero (1923), y de su madre poco después (1927), obligaron a sus familiares a inscribirlo en un internado en Guadalajara, la capital del estado de Jalisco”, informa la Fundación Juan Rulfo, de cuya página electrónica reproducimos casi en su totalidad esta “nota biográfica” del autor de Pedro Páramo.

 

 

 

“Durante sus años en San Gabriel entró en contacto con la biblioteca de un cura (básicamente literaria), depositada en la casa familiar, y recordará siempre estas lecturas, esenciales en su formación literaria. Algunos acostumbran destacar su temprana orfandad como determinante en su vocación artística, olvidando que su conocimiento temprano de los libros mencionados tendría un peso mayor en este terreno.

 

 

 

“Una huelga de la Universidad de Guadalajara le impide inscribirse en ella y decide trasladarse a la ciudad de México. La imposibilidad de revalidar los estudios hechos en Jalisco tampoco le permite ingresar a la Universidad Nacional, pero asiste como oyente a los cursos de historia del arte de la Facultad de Filosofía y Letras. Se convierte así en un conocedor muy serio de la bibliografía histórica, antropológica y geográfica de México, temas que un estudio minucioso de su obra literaria y fotográfica permite rastrear en las mismas, además de los textos y la labor editorial que les dedicó.

 

 

 

“Durante buena parte de las décadas de 1930 y 1940 viaja extensamente por el país, trabaja en Guadalajara o en la Ciudad de México y a partir de 1945 comienza a publicar sus cuentos en dos revistas: América, de la capital, y Pan, de Guadalajara. La primera de ellas significa su confirmación como escritor, gracias al apoyo de su gran amigo Efrén Hernández. Publica sus fotografías por primera vez, también en América, en 1949. Pero fue a finales de la década de 1930 cuando se iniciaba como escritor y fotógrafo, aunque pocos sabían de esto.

 

 

 

“A mediados de los cuarenta da comienzo también su relación amorosa con Clara Aparicio, de la que queda el testimonio epistolar (publicado en 2000 en Aire de las colinas. Cartas a Clara). Se casa con ella en 1948 y los hijos aumentarán la familia poco a poco. Abandona su trabajo en una empresa fabricante de neumáticos a principios de los cincuenta y obtiene en 1952 la primera de dos becas consecutivas (1952-1953 y 1953-1954) que le otorga el Centro Mexicano de Escritores, fundado por la estadounidense Margaret Shedd, quien fue sin duda la persona determinante para que Rulfo publicase en 1953 El Llano en llamas (donde reúne siete cuentos ya publicados en América e incorpora otros ocho, nuevos) y, en 1955, Pedro Páramo (novela de la que publicó tres adelantos en 1954, en las revistas Las letras patrias, Universidad de México y Dintel). En 1958 termina de escribir su segunda novela (muy breve), El gallo de oro, que no se publicará hasta 1980.

 

 

 

“Encuestas hechas en México, España, Alemania, Noruega y otros sitios ubican siempre los títulos de Juan Rulfo en un lugar prominente de la literatura universal. Sus lectores en las más diversas lenguas se renuevan continuamente y las nuevas traducciones no cesan de aparecer. Juan Rulfo es el escritor mexicano más leído y estudiado en su país y en el extranjero.

 

 

 

“En 2003, con motivo de los cincuenta años de la publicación de El Llano en llamas, apareció Noticias sobre Juan Rulfo, del reconocido especialista en Rulfo Alberto Vital. Se trata de un libro de gran formato y calidad, profusamente ilustrado, y constituye la biografía más completa dedicada al escritor y fotógrafo mexicano. En 2005, con motivo del 50 aniversario de la aparición de Pedro Páramo, se publica La recepción inicial de Pedro Páramo, de Jorge Zepeda, quien se consagró con este título como uno de los estudiosos más competentes de la obra de Juan Rulfo.

 

 

 

“En 2006, para recordar el 20 aniversario luctuoso de Rulfo, se publicó Tríptico para Juan Rulfo: poesía, fotografía, crítica, donde diversos autores abordan los temas del subtítulo en relación con su obra. En 2008 apareció Retales, compilación de 17 textos de otros autores que Rulfo había propuesto a los lectores de la revista El Cuento. En 2010 se ha presentado Juan Rulfo: otras miradas, obra de 500 páginas coordinada por Víctor Jiménez, Julio Moguel y Jorge Zepeda, en la que se reúnen opiniones sobre la obra de Juan Rulfo de autores extranjeros de primera importancia, como Gabriel García Márquez, Jorge Luis Borges, Susan Sontag, Tahar Ben Jelloun, Urs Widmer, Gao Xingjian, Kenzaburo Oe y otros, así como una serie de ensayos sobre el tema de la traducción de esa obra a los más diversos idiomas.

 

 

 

“Las dos últimas décadas de su vida las dedicó Rulfo a su trabajo en el Instituto Nacional Indigenista de México, donde se encargó de la edición de una de las colecciones más importantes de antropología contemporánea y antigua de México. Rulfo, que había sido un atento lector de la historia, la geografía y la antropología de México a lo largo de toda su vida, colmaría con este trabajo una de sus vocaciones más duraderas.

 

 

 

“La obra literaria de Juan Rulfo no cesa de editarse en español y un número creciente de idiomas, que se acercan al medio centenar actualmente. De algunas lenguas se han realizado ya varias versiones.

 

 

 

“Juan Rulfo falleció en la ciudad de México el 7 de enero de 1986”.

 

 

 

Rulfo fotógrafo

 

 

 

Rulfo adquirió su primera cámara —Rolleiflex— a finales de los años treinta y desde entonces se dedicó intensamente a la fotografía. Su acervo consta de 7 mil negativos de construcciones arquitectónicas (templos, casas, pirámides), estaciones de tren, pueblos y ciudades con gente (niños, mujeres, músicos).

 

 

 

“Rulfo publicó fotografías suyas por primera vez en 1949, en la revista América, como ya se dijo, y en 1960 expuso en Guadalajara una pequeña colección (unas 23) de sus fotos, pero fue la exposición de 1980 en el Palacio de Bellas Artes la que abrió al público más amplio el conocimiento de esta parte de su creación; desde entonces el interés por el fotógrafo Juan Rulfo no ha cesado de incrementarse y con él las exposiciones y los libros dedicados a sus imágenes”, consigna la Fundación del escritor.

 

 

 

En 2001 apareció México: Juan Rulfo fotógrafo, libro-catálogo de la exposición del mismo nombre, traducido ya al inglés, francés, italiano y alemán. La exposición se ha presentado en España, Italia, Francia, Grecia, Brasil, Argentina, Perú, los Estados Unidos, Marruecos, Portugal y México.

 

 

 

“En 2002 apareció el libro Juan Rulfo, letras e imágenes, con textos suyos sobre la historia y la arquitectura de México y una selección de sus fotografías de edificios mexicanos de diversas épocas. A principios de 2006 se presentó el libro de pequeño formato Juan Rulfo, fotógrafo (Conaculta, 2005-INAH, 2007), con una selección de fotos y estudio preliminar de Andrew Dempsey.

 

 

 

“En 2007 se dio a conocer el libro Tríptico para Juan Rulfo: poesía, fotografía, crítica, coordinado por Víctor Jiménez, Alberto Vital y Jorge Zepeda, con ensayos sobre la fotografía de Rulfo por Carlos González Boixo, Daniele De Luigi y Lon Pearson. Éste último autor presenta la exposición de 1960, recuperada gracias a su testimonio, y se reproducen las 23 fotografías que la integraron. Igualmente se hace en este libro una edición facsimilar del encarte que apareció en 1949 en la revista América con once fotografías de Rulfo, las primeras que alguna vez publicara.

 

 

 

“En 2009 ha aparecido otro libro de pequeño formato, Juan Rulfo: Oaxaca, con cincuenta imágenes tomadas por Rulfo en el estado mexicano de Oaxaca en la década de 1950. La selección de las fotos estuvo a cargo de Andrew Dempsey y Francisco Toledo.”

 

 

 

Las fotografías de Rulfo se exhibido en los principales museos y galerías de México, y en el extranjero en países como Francia, Estados Unidos, China, Rusia, Grecia, España, Bélgica, Austria, Reino Unido, Brasil y Alemania, entre otros.

 

 

 

JLB

 

 

 

Fuente: Conaculta